en el vientre ya se puede asesinar;
ser marica, divorciarse, y en
invierno
en la nieve incontrito fornicar.
Y drogarse, el cunnilingus practicar,
decir chistes y calumnias, groserías,
contra santos, actos píos,
jerarquías,
es corriente, sin que nadie ose
clamar.
Dice el poeta
Ya nadie en el Corpus hinca las
rodillas
al paso imponente de la procesión,
ni tímido cubre las nuevas lentillas
ante el dios redondo que oculta el
copón;
ni el rosario reza junta al alimón
familia que entonces guardábase
unida,
ni va a la parroquia tétrica y temida
a sacar, de honrada, certificación.
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